La gestión de proyectos de construcción rara vez se desarrolla de forma lineal. Los cambios (ya sean por causas técnicas, decisiones del cliente, factores externos o descubrimientos durante la obra) son inevitables, especialmente en proyectos complejos como hospitales, infraestructura pública, plantas industriales o desarrollos urbanos de gran escala.
La gestión del cambio no debe entenderse como un obstáculo, sino como una disciplina estratégica dentro de la dirección de proyectos. Cuando se maneja de forma estructurada y proactiva, permite mantener el control del alcance, los plazos y los costos, reduciendo riesgos y conflictos contractuales.
En este artículo exploraremos cómo anticipar, documentar y controlar los cambios en proyectos de construcción complejos, con base en las mejores prácticas internacionales y experiencias reales en América Latina.
¿Qué entendemos por “cambio” en un proyecto constructivo?
En el contexto de la construcción, un cambio se refiere a cualquier alteración respecto a lo planificado originalmente en el contrato, ya sea en:
- El alcance de obra (nuevos ítems, eliminación de partidas, ajustes de diseño).
- Los costos estimados o precios unitarios.
- El cronograma y duración del proyecto.
- La forma de ejecución o secuencia constructiva.
Un cambio puede surgir de múltiples fuentes:
- Solicitudes del cliente o supervisor.
- Cambios normativos o técnicos.
- Descubrimientos inesperados en el terreno.
- Interferencias de terceros (servicios, permisos, comunidad).
- Rediseños durante la fase de ejecución.
La importancia de una buena gestión del cambio
En proyectos complejos, donde intervienen muchos actores y contratos, no gestionar adecuadamente los cambios puede tener consecuencias críticas:
- Retrasos acumulados que afectan la ruta crítica.
- Sobrecostos sin respaldo contractual.
- Conflictos legales y arbitrajes.
- Reputación negativa ante el cliente o stakeholders.
- Riesgo de paralización de la obra.
Por eso, una gestión profesional del cambio se convierte en una herramienta para:
- Prevenir desviaciones incontroladas.
- Tomar decisiones informadas.
- Documentar técnicamente cada modificación.
- Conservar la trazabilidad y transparencia ante auditorías.
¿Qué se necesita para gestionar el cambio de forma efectiva?
a) Un proceso formal aprobado contractualmente
Debe existir en el contrato una cláusula de gestión de cambios que defina:
- Cómo se presenta una solicitud de cambio (RFQ, RFI, RCO, etc.).
- Quiénes están autorizados a emitir, revisar y aprobar cambios.
- Qué documentos deben acompañar la solicitud (memoria justificativa, impacto económico, cronograma, planos revisados, etc.).
b) Un sistema de control documental
Un error frecuente en Latinoamérica es la informalidad en la documentación. Una solicitud verbal no vale en una auditoría. Debe haber un repositorio de solicitudes, órdenes de cambio y aprobaciones (en papel, digital o mediante software).
c) Un equipo capacitado y coordinado
Desde el residente de obra hasta el gerente de proyecto, todos deben conocer el procedimiento. La coordinación entre áreas técnicas, legales y administrativas es fundamental.
Tipos de cambios más comunes en obras complejas
Tipo de cambio | Ejemplo | Recomendación |
---|---|---|
Cambio en alcance | Añadir un muro cortafuego no contemplado. | Justificar técnicamente y recalcular metrados. |
Cambio en diseño | Modificar la cimentación tras hallazgos geotécnicos. | Coordinar con estructuristas y replantear cronograma. |
Cambio de especificaciones | Sustituir acabados por otros de mayor calidad. | Analizar impacto económico y validar proveedor. |
Cambio contractual | Reasignar partidas a otro contratista. | Modificar el contrato con adendas claras. |
Cambio por interferencias | Tuberías no previstas interfieren con cimientos. | Registrar con fotos, planos y solicitar reingeniería. |
El ciclo de vida de un cambio
La gestión de cambios sigue un flujo típico que debe ser respetado:
- Identificación del cambio
Cualquier actor lo detecta y lo documenta. - Solicitud formal (RCO o similar)
Se entrega una solicitud por escrito, incluyendo justificación técnica. - Evaluación técnica y económica
El equipo técnico analiza viabilidad, costos y plazos. - Aprobación o rechazo
El cliente o supervisor responde oficialmente. - Implementación
Si se aprueba, se actualiza el contrato, planos y cronograma. - Seguimiento y control
Se supervisa la ejecución del cambio y se actualiza la documentación.
Herramientas para facilitar la gestión del cambio
Hoy existen múltiples soluciones digitales para gestionar cambios en obra compleja:
Software de gestión de proyectos
Plataformas como Oracle Primavera, Microsoft Project, Procore o Buildertrend permiten registrar y rastrear solicitudes de cambio, asignarlas, adjuntar documentos y controlar su estado.
Modelado BIM con trazabilidad
Cuando se trabaja con modelos BIM, es posible visualizar los impactos de un cambio antes de implementarlo, así como documentar versiones anteriores del modelo.
Sistemas integrados de control (como OPUS o Neodata)
Permiten reflejar los cambios en presupuesto, actualizar precios unitarios y ajustar estimaciones.
Recomendaciones clave para empresas constructoras
- Incluir desde el inicio un protocolo de cambios en el contrato.
- Capacitar al equipo técnico y administrativo en el uso de ese protocolo.
- No ejecutar ningún cambio sin aprobación escrita.
- Usar herramientas digitales para el registro y trazabilidad.
- Asignar responsables claros para cada fase del proceso.
- Analizar el impacto acumulado de los cambios en los objetivos del proyecto.
Conclusión
En los proyectos de construcción complejos, los cambios son inevitables, pero su impacto puede y debe ser gestionado. Una obra no se sale de control por el cambio en sí, sino por la falta de una gestión estructurada del mismo.
Implementar un sistema profesional de gestión del cambio —basado en procesos, documentación, trazabilidad y tecnología— es uno de los mayores diferenciadores entre proyectos exitosos y proyectos problemáticos.
Gestionar el cambio es gestionar la realidad. Y hacerlo bien es una muestra de madurez técnica y organizacional.